Otro susto

Parecía que tenía el coche arreglado pero esta mañana, al ir a trabajar, volvió a hacerme las cosas raras del otro día y por precaución lo deje en el taller. Parece que no era nada, solo que con el ajuste del acelerador, se ha vuelto más sensible y tengo que apretarlo más.

Aun con todo eso, para asegurarme, lleve a mi hermana al curso, cerca de los arcos. Efectivamente, era eso. Aunque sigo con la mosca detrás de la oreja.