Una vez terminado el primer libro de la saga de Malaz, me quedan muchas incógnitas sobre la historia que se tendrán que resolver en posteriores entregas. Pasa algo parecido a la Historia de Kvothe y, aunque en menor grado, también pasa con Canción de Hielo y Fuego. Así es la fantasía épica y nadie la va querer cambiar mientras que corramos como posesos a comprar sus tomos.
Volviendo al los jardines de la luna (el primer tomo de la saga), he de decir que me ha gustado. Incluso, una vez finalizada la novela, he vuelto a releer algunos capítulos, en los que había detalles confusos, que luego se revelan más claramente. Me pillaré el siguiente.