No recuerdo si esa frase aparece en alguna película, pero poco importa, porque cuando las cosas se hacen bien, todo encaja.
La prueba del Ajaxeitor en el fuego real de una aplicación, y no desde un ejemplo preparado para la ocasión como hice el miércoles pasado, ha ido de perlas, mejor que en mis más optimistas pensamientos.
Implementarlo ha estado tirado, usarlo ha sido sencillísimo, agregarle características para 'cachear inteligemente' ha sido trivial, y solucionar algunos problemas que han surgido ha sido un paseo triunfal.
¿Qué más se podía pedir? Nada, porque lo que habiamos hecho era perfecto. Pensado para ajax, pero sin ajax.
La prueba del Ajaxeitor en el fuego real de una aplicación, y no desde un ejemplo preparado para la ocasión como hice el miércoles pasado, ha ido de perlas, mejor que en mis más optimistas pensamientos.
Implementarlo ha estado tirado, usarlo ha sido sencillísimo, agregarle características para 'cachear inteligemente' ha sido trivial, y solucionar algunos problemas que han surgido ha sido un paseo triunfal.
¿Qué más se podía pedir? Nada, porque lo que habiamos hecho era perfecto. Pensado para ajax, pero sin ajax.
No hay comentarios:
Publicar un comentario