No se puede decir otra cosa sobre el retraso en la publicación del tercer libro de Patrick Rothfuss en la saga de las Crónicas del asesino de reyes o la del sexto y séptimo libro de Canción de Hielo y Fuego de George R.R. Martin. No me olvido de otro caso más reciente como la tercera entrega del cómic Los asesinatos de lunes negro de Jonathan Hickman.
En todos estos casos los autores me dejaron huérfano de una historia que me apasionaba. Quizás los autores no tengan la culpa. Intereses comerciales se pueden cruzar por enmedio. En el caso de los dos primeros han publicado otro material, relacionado todos con las historias que parieron, pero como material de relleno. En el último caso no sé si el autor también se está dedicando a otros quehaceres más prioritarios.
Hace tiempo aprendí como lección en la vida que "aquello que se empiece hay que acabarlo". Parece que es difícil cumplir con ella.