El jueves aproveche para dejar el coche en el taller para que le cambien la correa de distribución y todos los filtros, además de que le hagan una revisión completa de todos lo demás y no limitarse a lo básico.
El coche, con ocho años y medio y 131000 kilómetros a la espalda lo iba necesitando. Se lo nota que va teniendo más ruidos, no siendo tan silencioso como antes. Por ejemplo, el ruido del motor es más bronco, como más mayor y no se aísla tan bien del ruido del exterior como antes.
De momento, lo único que le han encontrado ha sido algo de holgura en la cremallera de la dirección y le van a cambiar dos dientes (ni zorra idea de lo que es). Por lo demás, parece que "perfecto".
El objetivo de llegar a las 200000 kilómetros para considerar amortizado el coche sigue estando ahí. Al ritmo que llevo, cuatro años largos le quedan.
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