Hemos tirado a la basura la estantería que se rompió la semana pasada. Nos hemos quedado con las baldas cortas que no se rompieron y con los juegos de tornillos y sujetas baldas. Los paneles laterales y el fondo plano han seguido el camino del contenedor.
Ya tenemos un esbozo de lo que necesitamos, dos estanterías con puertas de cristal, que nos salen más caras pero ayudan mucho a la hora de limpiar menos. Hemos realizado la primera visita al Ikea, pero una duda sobre la terminación de los colores negro-marrón nos hicieron posponer la compra. En todo caso, sabemos que tenemos que comprarla, no podemos tener mucho más tiempo los libros apilados debajo de las dos mesas del escritorio.
Esa es otra, las dos mesas del escritorio también están pidiendo a gritos una sustitución. Las mesas son dos paneles (120x90 cm) de aglomerado de dos capas, con cuatro patas que van atornillas a cada panel. Una solución de bajo coste que ha servido hasta el momento, pero que tarde o temprano tendremos que reemplazar por algo más duradero, ya que presentan cierto movimiento de vaivén que no me gusta (los tornillos necesitan un apretado cada cierto tiempo y van cogiendo holgura).
No hay comentarios:
Publicar un comentario