Desde el jueves pasado he ido teniendo dos o tres sueños por día. Ahora no recuerdo más que los de esta mañana y es una lástima que no escribiera los de los otros días cuando me desperté, porque cuando lo hice aún los recordaba con lujo de detalles.
Los de hoy giraban en torno a un viaje en tren, en el que iba sentado en la parte delantera de un viejo tren de vapor (parecida a la que sale en la película 'El maquinista de la general'). La vía tenia escalones. Viajaba sentado en una silla de hierro similar a la de Frankenstein cuando le dan la vida.
Mi destino era llegar a un país en el que todo el mundo viste de época Luis XIV y me realizan un recibimiento como si se tratara de un embajador. A mi hermano, que me acompañaba, lo confunden con mi asistente y lo tratan como tal. En todo momento, para no inflingir el protocolo, dejo hacer a los notas pero siempre llevo a mi hermano conmigo.
Otro trataba de que iba con el tiempo justo para coger un autobús pero iba andando y llegaba en el momento en el que salía de la parada y lo perdía.
Y el último giraba en torno a que realizaba un sesudo estudio sobre la 'depilación indolora de la ingle femenina'. La sensación de agobio y preocupación para evitar el dolor me tenía tan absorto que no me fijaba en otras cosas.
Los de hoy giraban en torno a un viaje en tren, en el que iba sentado en la parte delantera de un viejo tren de vapor (parecida a la que sale en la película 'El maquinista de la general'). La vía tenia escalones. Viajaba sentado en una silla de hierro similar a la de Frankenstein cuando le dan la vida.
Mi destino era llegar a un país en el que todo el mundo viste de época Luis XIV y me realizan un recibimiento como si se tratara de un embajador. A mi hermano, que me acompañaba, lo confunden con mi asistente y lo tratan como tal. En todo momento, para no inflingir el protocolo, dejo hacer a los notas pero siempre llevo a mi hermano conmigo.
Otro trataba de que iba con el tiempo justo para coger un autobús pero iba andando y llegaba en el momento en el que salía de la parada y lo perdía.
Y el último giraba en torno a que realizaba un sesudo estudio sobre la 'depilación indolora de la ingle femenina'. La sensación de agobio y preocupación para evitar el dolor me tenía tan absorto que no me fijaba en otras cosas.
Es fácil la interpretación de tus sueños: Las siete espigas gordas significan siete años de grandes cosechas, y las siete espigas flacas que se comen a las gordas, otros siete años de carestía.
ResponderEliminarLo que no tengo muy claro son las vacas.
Te veo un prometedor futuro como interpretador de sueños, con canal de televisión propio, y tendras que abandonar la zanfoña.
ResponderEliminarjajajjaa que alguien le dé una beca a este hombre para que estudie sobre la "depilación de ingle sin dolor"
ResponderEliminarpor dios!!!!y de camino investiga sobre la de sobaco que no veas si duele tambien
jajaj
Una paga, si es posible, me vendría bien.
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