Comienza el día a las cuatro de la mañana. Desayuno a las cuatro y media. Salida en mini-autocar (16 plazas) hacia El valle de los reyes. Es increible ver las tumbas llenas de jeróglificos por primera vez. Visito tres tumbas. No voy a la de Tutamcamon porque no hay nada allí, lo importante lo veré en el Cairo.
A la vuelta pasamos por el templo de la reina Hasetsu. Una faraona que aparecia delante de sus subditos con dos facetas, masculina y femenina -incluso se ponia barba postiza-. La reina tenia un sobrino que luego fue faraón y que se dedico a borrar su nombres y representaciones de las inscripciones de los templos que construyo, algo repetido posteriormente por otros.
Pasamos junto a los colosos de Memmoth. Cruzamos el nilo en barca para visitar el templo de Luxor. Veo estatuas colosales y el Obelisco gémelo al que hay en el museo del Louvre en Paris. El que falta fue dado a los franceses para que ayudaran a Egipto en no sé que guerra. Los templos se van ampliando hacia fuera por reyes posteriores para quedar inmortalizados. Después ir al barco para la comida.
Por la tarde (las tres), salimos para visitar los templos de Karnak. Allí puede ver las salas de las columnas y más obeliscos. Cuando regrese al barco, era de noche. Antes de la cena se nos informa de cual era el plan para el día siguiente.
Copita en el bar y a la cama algo borrachin. La cerveza que nos dan se llama Shakhara Gold, botellines de medio litro. Esta buena.
A la vuelta pasamos por el templo de la reina Hasetsu. Una faraona que aparecia delante de sus subditos con dos facetas, masculina y femenina -incluso se ponia barba postiza-. La reina tenia un sobrino que luego fue faraón y que se dedico a borrar su nombres y representaciones de las inscripciones de los templos que construyo, algo repetido posteriormente por otros.
Pasamos junto a los colosos de Memmoth. Cruzamos el nilo en barca para visitar el templo de Luxor. Veo estatuas colosales y el Obelisco gémelo al que hay en el museo del Louvre en Paris. El que falta fue dado a los franceses para que ayudaran a Egipto en no sé que guerra. Los templos se van ampliando hacia fuera por reyes posteriores para quedar inmortalizados. Después ir al barco para la comida.
Por la tarde (las tres), salimos para visitar los templos de Karnak. Allí puede ver las salas de las columnas y más obeliscos. Cuando regrese al barco, era de noche. Antes de la cena se nos informa de cual era el plan para el día siguiente.
Copita en el bar y a la cama algo borrachin. La cerveza que nos dan se llama Shakhara Gold, botellines de medio litro. Esta buena.
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