Durante el fin de semana he estado dandole vueltas a un asunto, que creía que tenia resuelto el viernes cuando se planteó el problema. No era así.
En principio tenia dos soluciones, una intuitiva pero poco práctica (y con un coste muy grande), otra menos intuitiva pero que tenia un impacto muy grande en otra serie de tareas que no estaba muy seguro de poder soportar. Al final, vi que la segunda solución era muy compleja de llevar a cabo, por lo que tuve que pensar en otra solución.
La tercerá forma la pensé ayer (creo que fue durmiendo/soñando, pero no lo recuerdo bien). Esta mañana, en una hora, la tenia en funcionamiento con un resultado espectacular.
Lo importante es pensar las cosas, darle vueltas a los asuntos, antes de remangarse y meterse en los charcos, puesto que ayuda a encontrar soluciones en donde menos te lo esperas, porque conoces mejor el problema y eso influye en darte cuenta de detalles que serán cruciales en una buena solución.
En principio tenia dos soluciones, una intuitiva pero poco práctica (y con un coste muy grande), otra menos intuitiva pero que tenia un impacto muy grande en otra serie de tareas que no estaba muy seguro de poder soportar. Al final, vi que la segunda solución era muy compleja de llevar a cabo, por lo que tuve que pensar en otra solución.
La tercerá forma la pensé ayer (creo que fue durmiendo/soñando, pero no lo recuerdo bien). Esta mañana, en una hora, la tenia en funcionamiento con un resultado espectacular.
Lo importante es pensar las cosas, darle vueltas a los asuntos, antes de remangarse y meterse en los charcos, puesto que ayuda a encontrar soluciones en donde menos te lo esperas, porque conoces mejor el problema y eso influye en darte cuenta de detalles que serán cruciales en una buena solución.
la clave está en.. darle vueltas a las cosas que tienen posible solución.. lo malo es cuando le damos vueltas a las cosas que no la tienen.. es lo más inutil que hay.. pero si puede tenerla.. no está nada mal pararse un poco a pensar..
ResponderEliminarme alegro por ti!