Al pasar por la calle San Luis regresando del trabajo, me cruce con un perro, al que su dueño metía en su casa. El perro lleveba en la boca un balón pinchado. Inmediatamente pensé: 'joder, el dueño cada vez que saca a su perro, también saca el balón' porque me da la impresión que era la primera vez que el perro tenía el balón en la boca. Era su balón.
Igual que yo, sólo que no llevo una balón entre los dientes, llevo un cubo de rubik en la mochila. Y ya que saco el tema del cubo, estoy en la fase de compresión para realizar las doce aristas, que es lo que le sigue a cuando ya sabes montar las seis caras centrales. Me cuesta, pero una vez que saque los movimientos tendré algo parecido a un cubo de rubik de 3x3x3, que ya sé resolver.
Igual que yo, sólo que no llevo una balón entre los dientes, llevo un cubo de rubik en la mochila. Y ya que saco el tema del cubo, estoy en la fase de compresión para realizar las doce aristas, que es lo que le sigue a cuando ya sabes montar las seis caras centrales. Me cuesta, pero una vez que saque los movimientos tendré algo parecido a un cubo de rubik de 3x3x3, que ya sé resolver.
Estoy deseando ver ese cubo nuevo... terminado.
ResponderEliminarEl cubo, la pelota...la geometría del juego, che, y yo que creí que las matemáticas eran un rollo
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